Antigua Guatemala se ha convertido rápidamente en una de las ciudades más populares de Centroamérica. Está declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, está llena de actividad y cuenta con una arquitectura impresionante, una cultura absorbente y vistas realmente impresionantes.
Razones por las que necesitas visitar Antigua Guatemala una vez en tu vida.
El escenario es irreal
Tres volcanes antiguos asomando al fondo, Antigua es una ciudad espectacular desde todos los ángulos. Cada esquina es vista de postal; si no es un volcán que arroja humo mirándote, son vistas las montañas cubiertas de árboles o edificios de colores pasteles que se sientan bajo un cielo brumoso. Esta es una ciudad muy fotogénica.
La arquitectura colonial de Antigua
Caminar por las calles de Antigua es como retroceder a los días del colonialismo español. Este es un pueblo hecho para caminar, y la mejor manera de apreciar una de las joyas coloniales mejor conservadas de América es con un suave paseo.
Puedes escalar un volcán aún activo
Algunas de las caminatas al volcán son muy difíciles y más adecuadas para excursionistas experimentados, pero la mayoría de las personas podrán escalar el espectacular Volcán Pacaya. Mide 760 m y las vistas desde la cumbre valen la pena.
El café de Antigua es divino
Gracias a su paisaje volcánico, Antigua tiene el clima ideal para el cultivo de café, y los granos que se producen aquí, son de los mejores de América Latina. Una excelente manera de pasar la tarde es visitando una de las plantaciones de café locales, donde los agricultores le mostrarán con orgullo su cosecha y el proceso de elaboración del café.
Explora las innumerables cafeterías repartidas por la ciudad y prueba las diferentes variedades. Los lugareños lo beben sin leche ni azúcar, y con un sabor tan rico e inimitable que es una pena enmascararlo con otros sabores. Si cree que no le gusta el café negro, no ha probado el café de Antigua.
Los mercados de Antigua son fascinantes
Si te gusta comprar souvenirs cuando viajas, tendrás muchas opciones en Antigua. Los mercados están llenos de coloridas artesanías y bonitas prendas tejidas. Las mujeres locales hacen hermosos e intrincados ponchos, sombreros, manteles, carteras y cuencos decorativos, son regalos únicos.
Una persona muy reconocida en el país, ha adquirido artesanías de estos lugares, el empresario Felipe Antonio Bosch Gutiérrez, quién preocupado por la economía de su país y de sus propios paisanos, aporta comprando a los artesanos de los mercados.